martes, 10 de marzo de 2009

Cortázar en el laberinto borgesiano

A los 25 años de la muerte de Cortázar, cumplidos el mes pasado, me gustaría investigar, brevemente, las relaciones que mantiene el escritor con su compatriota Borges; caminos que quizás se cruzaran, pero que no compartieron realmente un lugar común. Lo que sigue es meramente mi opinión al respecto. Jorge Luis Borges escribió muchos cuentos en los cuales el centro de la narración era algún laberinto físico, mental o simbólico. Estos laberintos sirven para envolver al lector y al los personajes en un mundo que nunca acaba. También los cuentos de Borges demuestran ser analíticos en los cuales todo se investiga y a todo se le busca una razón de ser. Si un crítico le atribuyera a Borges alguna influencia sobre los cuentos de Cortázar diría que los cuentos de éste son una rebeldía en contra de las ideas de Borges. Borges exponía muchas ideas en sus libros, como el miedo al espejo, y Cortázar enfrentaba estas ideas y las dominaba creando así diferencias entre los dos. Borges le temía a los espejos porque estos eran capaces de en una copulación hipotética y así crear nuevos seres.

Cortázar mezcla la realidad física y la realidad mágica en una sola y no podemos discernir cual es cual lo que nos lleva a dudar de nuestra propia existencia. Borges nos lleva a creer que existe una verdad a nuestra realidad de la cual no estamos al tanto, como sucede en Tlón, Uqbar, Orbis Tertius. Cortázar nos dice que la realidad en verdad no existe, que todo es una mezcla de sueños y espíritus y que 'la vida es un sueño' como sucede en La noche boca arriba y La casa tomada. El elemento que se puede notar que ha influenciado a Cortázar es la idea de los laberintos. Mientras que Borges usaba los laberintos para crear situaciones de búsqueda, Cortazar los usa para darle un toque de ambigüedad a su cuento. Para Borges el laberinto es el elemento que hace girar la historia y para Cortázar el laberinto es el elemento en donde la historia va entretejida.

Puede argumentarse que Cortázar toma los temas de Borges y los cambia a su manera para adaptarlos a sus ideales. Entre estos dos autores ocurre un intercambio de ideas muy singular que consiste en la distorsión de las ideas de Borges. Cortázar se rebela ante las ideas de Borges y las adopta como en forma de desafío quizás. Lo que podemos notar es que la manera que Cortázar estructura sus cuentos es bastante diferente a la de Borges, pero los temas que usa tienen huella de Borges impresa en cada palabra. En cuanto a la parte de la obra cortazariana que corresponde a la misma epoca, no hay -que yo sepa- evidencia de textos que tematicen de manera explicita el mito o la figura del laberinto. Sin embargo, es bien conocido que desde los primeros comienzos de su carrera Cortazar mostro interes por la mitologia y por los temas clasicos en general. Con la publicacion de Casa tomada en diciembre de 1946 asoma por primera vez -a traves de una arquitectura extravagante, la presencia monstruosa y la figuralidad del hilo y del tejido- la figura del laberinto en la obra cortazariana. Pero la inscripción del hipotexto mitologico no ocurre hasta que Los Reyes se publica en Los Anales de Buenos Aires, casi un año mas tarde.

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